lunes, 24 de junio de 2013


CARTA X A ESTOMAKAL.

No puedo terminar este apartado sin volver de nuevo la vista al aspecto político, que a partir de ahora va a ser determinante. Pero desde ya, hay que dejar despejada, de una vez por todas, una de las patrañas más queridas por la mitología catalanista: EL IMPERIALISMO CENTRALISTA CASTELLANO.

Salvo cuando se cite otra obra , sigo en este tema la ya tan citada obra de Luis González Antón:

“No cabe hablar con rigor de castellanización entendida como asimilismo o expresión de un imperialismo castellano, o como imposición de una uniformidad jurídico política que la Dinastía (de los Austrias, aclaración mía) no intentó implantar en absoluto…. La castellanización del Estado no sirvió a los reales intereses de las gentes de Castilla, que pagaron un alto coste porque la Monarquía se apoyara exclusivamente sobre ella. Castilla era a un tiempo ”la cabeza de la Monarquía” y “la más pechera”, la más gravada fiscalmente. Existe una conciencia bien temprana de que la falta de colaboración de los demás reinos obliga a las gentes modestas de Castilla a un esfuerzo superior. Las Cortes de Toledo de 1538 piden “que ya que se cargan a estos reinos algunas cosas que en todo o en parte incumben a otros reinos de V.M. … suplicamos a V.M. tenga por bien que esta distribución se justifique y reparta a todos los estados a quien incumbe su sustentación”.

No se hizo así y la consecuencia fue la ruina de Castilla. .. En una fecha tan especial como 1626, las Cortes Castellanas destinan 600.000 ducados de su servicio para la defensa de las fronteras exteriores de Navarra, Guipúzcoa, Aragón y Cataluña”. LUIS GONZALEZ ANTON. España y las Españas. Alianza Editorial. Madrid 1997. Pág. 271.

En cuanto al “saqueo de la economia castellana por reyes y gobernantes”, conforme a la cita anterior de Soldevilla, con decirlo él creo que basta.

La historiografia más solvente avala esta tesis; apelo al testimonio de dos historiadores de reconocido prestigio internacional y aceptados unánimente por la historiografia catalana:

1.- Pierre Villar: “Renunciemos, pues, a la imagen de una Cataluña ahogada por el centralismo real, castellano”. Dispongo de la cita pero no de la obra. Lo siento.

2.- John Elliot: “Ese concepto de castellanización agresiva no es sino un fantasma inventado por la historiografía catalanista del siglo pasado. Esta interpretación conspirativa tiene más de las fobias decimonónicas que de las realidades del siglo XVII.” JOHN ELLIOTT. La rebelión de los catalanes. Madrid 1977.

De nuevo las preguntas que motivaron todo esta excursión histórica:

¿Dónde está la pedagogía del odio? ¿Quién incita al odio? ¿Quién odia?.¿Quién retuerce la realidad histórica a sabiendas? ¿Los historiadores o los historiadores con adjetivo, los nacionalistas? Para respuesta, repasa las citas que antes transcribí de Cambó y Prat de la Riba. Y a su servicio, Ferran Soldevilla et alii.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario